"Algo de mis Yo's Puntosuspensivadas (…)" by Brenda G. alias Kamala Telb

Siddharta y Kamala

Palabras de Siddharta a Kamala

"Tú eres como yo, diferente de la mayoría de las personas, eres Kamala y nada más. Dentro de ti hay paz y un refugio a donde puedes ir a cada hora del día. Yo también puedo hacerlo. Poca gente tiene ese asilo y, sin embargo, todos lo podrían tener."

Ujuuum....ASI MISMITO!!

Ujuuum....ASI MISMITO!!

jueves, 24 de junio de 2004

(KT-2004) "Reproche a mi Niño Herido Interno para ... " by YO

Reproche a mi Niño Herido Interno para... Amarlo de nuevo

Por: “Kamala Telb”
24 junio 2004
Hoy me urge confrontarte para entenderte y aprender a amarte de nuevo. Han pasado muchos años y aún rabías por aquel evento. Continúas manejando mi vida de adulto, con tu dolor reprimido y tu lamento. Hoy me urge confrontarte para entenderte y aprender a amarte de nuevo.

Mi cuerpo visible cuenta ya muchísimos años más que el tuyo; sin embargo, eres tú, mi Niño herido quien me contamina con tus carencias, tus resentimientos y con tu vano orgullo. Eso no me gusta y por eso hoy escojo confrontarte para ser objetivo y actuar desde lo justo.

Niño interior herido, deja ya de lastimarme con tu inconcluso e incomprendido dolor. Ya entendí que fuiste maltratado, humillado, despreciado y malherido. Ya entendí que te obligaron a callar tu tristeza, tu enojo y lo repugnante del abandono. Ya entendí muchas cosas y por eso hoy te confronto.

He cargado toda mi vida, con tu culpa de lo ilógico y por más que me he esforzado, continúas condenándome y eso ya no lo soporto. Poseíste mi cuerpo de adulto y me mataste con tus odios; odios reprimidos que ya me apestan y por los que hoy te confronto.

Puedo entender como adulto, que no entendieras lo que pasó en tu entorno y aquellas palabras hirientes que te hirieron profundo y muy hondo. Por tu rabia reprimida, me hundiste contigo hasta el fondo y no me parece justo que sigas dominando mi mundo, mi rumbo y mi entorno.

Antes de abrazarte, te advierto que como adulto decido, asumir el timón de mi vida y echar odios tuyos al abismo para que no quede absolutamente nada oculto. Muchas cosas que hiciste, con mi cuerpo de adulto que hiciste tuyo, mancillaron mi conciencia y provocaron la auto-condena de mi espíritu y también del tuyo.

Hoy te digo ¡BASTA! y como adulto te recuerdo que aun comprendiendo tu rabia, soy yo quien tomo el timón y el sendero. Esta vez, no asumiré la actitud de anular sentimientos, y me convertiré en tu padre/madre para acogerte y viajar juntos a nuestros dolorosos recuerdos.

Emprenderemos ahora un viaje al dolor original que provocará nuestro reencuentro, y permitiré que manifiestes todo cuanto sufriste en silencio y todo cuanto te provocó tantos desvelos.

Como adulto puedo entender que tú como niño no comprendieras tantos desaciertos que viviste con tus padres y que te condujeron al aislamiento; tantas veces que huiste por los reproches de ellos, tantas veces que sentiste que ningún nuevo intento era suficiente para que te abrazaran como a un niño bueno.

Me pongo en tu lugar ahora siendo adulto ya viejo, y reconozco el gran dolor que nos ha unido por tanto tiempo. Te aseguro, mi Niño interno, que no tuviste ni tenemos culpa de todo aquello, y que incluso nuestros padres hicieron lo mejor que pudieron, ya que también ellos fueron controlados por su Niño herido en su doloroso lamento.


En este viaje de regreso, observo un absurdo evento que me aturde porque aun no lo acepto. Siendo adulto mi cuerpo, se rebeló un día mi Niño herido interno. Ese fatídico día, le quité la vida a quien vi en mi espejo. Se mezclaron todas mis rabias, confundiendo mi intelecto y rompí con mis manos el espejo y mi reflejo. Vi mi imagen distorsionada y todos mis desvelos, mas al pasar los años aun no comprendo por qué no puedo amar a quien ha sido mi Niño herido e indefenso.

Quiero que sepas mi Amado Niño que vives en mi centro, que ahora hay ante nosotr@s un nuevo reflejo y otro espejo. Hoy podemos juntos colorear aquellos dolorosos recuerdos, para convertirlos en importantes oportunidades de crecimiento. Hoy puedo abrazarte de nuevo y obsequiarte la certeza de que nadie nos condena por nada ni en ningún tiempo, que sólo actuamos como mejor pudimos hacerlo, y también te recuerdo que llegó el momento de soltar profundos recuerdos y perdonarnos en lo interno y en lo externo.

Te aseguro mi Amado Niño que éste es un nuevo comienzo, que de hoy en adelante te acogeré en mi pecho. Es necesario que junt@s revivamos ciertos momentos, para explorar todo lo que nos dolió de nuestros queridos e incomprendidos viejos. Esta vez dirigiré nuestro barco usando mis conocimientos, pues aun cuando nos urja que afloren antiguos resentimientos, no perderemos de perspectiva que se trata de un extraño viaje de regreso para poder finalmente comenzar de nuevo.